Los alimentos fermentados y los probióticos podrían constituir una estrategia nutricional valiosa.. Pero los términos “alimentos fermentados” y “probióticos” no son sinónimos

Los alimentos fermentados son aquellos obtenidos mediante el desarrollo controlado de microorganismos (bacterias, levaduras, hongos) y su acción enzimática sobre un sustrato alimenticio. La fermentación mejora la digestibilidad y la biodisponibilidad de algunos nutrientes.Los alimentos fermentados pueden provenir de la fermentación de la leche (yogur, kéfir), de vegetales (chucrut, kimchi), de cereales (cerveza, avena fermentada) y de legumbres o
frutas (bebidas alcohólicas).

Los probioticos son microorganismos vivos que, cuando son administrados en cantidades
adecuadas, ejercen un efecto benéfico sobre la salud

La definición de “probiótico” implica tres aspectos:
1) que se trate de un microorganismo –o mezcla de microorganismos– definido microbiológicamente, es decir, del que se conozcan el género, la especie y la cepa
2) que se trate de microorganismos que se encuentren vivos al momento de ser consumidos; y 3) que exista, al menos, un estudio clínico de eficacia que demuestre sus efectos
beneficiosos.

Es por esto, que no necesariamente un alimenti fermentado tiene efecto probiótico.
Tomado de Arch Argent Pediatr 2021;119(1):56-61 / 56